La Capoeira es defensa personal, acrobacia, historia, filosofía de vida, música, ritmo, amor, poesía, educación, cultura y es el arte de jugar con nuestro propio cuerpo en el tiempo y espacio, no solo desde el punto de vista de la psicomotricidad sino de la contextualización de su propia identidad histórica. Todo esto es movimiento y si es movimiento, es vida. Movimiento y vida son sinónimos de arte, expresión y cultura.
Es el movimiento que el ser humano utiliza en el medio ambiente para alcanzar objetivos deseados y satisfacer sus necesidades, como la de la comunicación, la expresión de la creatividad y de los sentimientos. Es a través del movimiento que el ser humano aprende sobre sí mismo. La vivencia corporal de un niño o un joven debe estar involucrada en un comportamiento de exploración y de placer en el descubrimiento, haciendo que su cuerpo descubra y desafíe sus propios límites, que use en situaciones de peligro que raciocine lógicamente y que se torne cada vez más creativo y espontáneo, actitudes exigidas para el hombre en este comienzo de siglo.
Los niños son originales y únicos, haciendo parte de una sociedad, son todos diferentes unos de otros. De esa forma, cada individuo en la sociedad, tiene su forma de ser, su esencia, su historia.
¿Y por qué nos interesa?
Los esclavos en Brasil crearon a la capoeira en función de las necesidades históricas de la época. En su época consiguio la libertad del pueblo, actualmente la Capoeira nos libera de cosas como las drogas, los problemas de la vida diaria y el estress.
De esta forma lo que a simple vista puede parecer una danza, es en realidad la forma de expresión de todo un pueblo con muchas limitaciones. Lo que nos sirve como ejemplo al descubrir que dentro de una sociedad tan marginada como la de los esclavos, estos fueron capaces de seguir creyendo en sus raíces y crear una expresión artística que envuelve toda una filosofía de vida. La capoeira en nuestros días es un impresionante arte marcial, que ahora se presenta atlético, poderoso y con mucha energia pero que jamás ha dejado sus raíces tradicionales. La mezcla exacta de historia y evolución.
